Ciñéndonos a la clasificación climática de Kóppen, en el archipiélago canario caben distinguir dos tipos climáticos diferentes, el tipo B (clima seco) y el tipo C (clima templado-cálido). Entre los distintos subgrupos, El Hierro se caracteriza como de tipo climático Seco estepario (BS), cálido y seco (BSh), con temperatura media anual superior a 18 °C.

El clima de El Hierro está condicionado por su posición geográfica en las proximidades del Trópico de Cáncer, hecho que permite que la influencia de los vientos alisios y de las corrientes marinas dulcifiquen y humedezcan, lo que de otra manera sería un clima predominantemente subdesértico. Precisamente, uno de los rasgos más peculiares del clima herreño y canario es la suavidad de las temperaturas, cuyos valores son moderados a lo largo de todo el año, sin grandes contrastes estacionales. Las temperaturas de la costa en El Hierro oscilan entre los 19º C y los 23º C. Durante casi todo el año sopla un viento moderado o fuerte. La temperatura  de las aguas varía  entre los 19º C de enero y los 23º C de septiembre.

El relieve, combinando los efectos de la altitud y la exposición, tiene una gran influencia en el clima y tiempo de cada localidad, muy especialmente en lo que a cantidad de lluvias se refiere. Son precisamente estos factores, los que determinan la gran diferencia entre las precipitaciones que se registran en las distintas situaciones, que pueden oscilar entre los apenas 50 mm, de las zonas meridionales de litoral y los casi 1.000 mm, de las áreas de medianía norteñas. A ello hay que sumar el importante efecto de la colisión del mar de nubes sobre las laderas al norte de la isla, que desencadena el fenómeno de precipitación horizontal. La influencia de las brumas también se deja sentir en las laderas opuestas ya que el viento húmedo, una vez rebasada la línea de cumbres, tiende a “desbordarse” por ellas, afectando parte de la vertiente hasta que las nubes se disipan (hacia los 800 m) por el efecto Foehn y la descompresión.

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Mapa de precipitaciones medias anuales.

Si bien las características básicas del clima herreño vienen determinadas por factores exógenos como las corrientes marinas del banco sahariano y los vientos alisios, la combinación de condiciones orográficas y ambientales permite identificar una amplia diversidad bioclimática. Siguiendo la metodología de Rivas‐Martínez (1997) y en el estudio bioclimático de El Hierro (del‐Arco et al. 1999) pueden distinguirse para la isla de El Hierro hasta 13 pisos bioclimáticos.

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Véase el proyecto “Climadat: La Reserva de la Biosfera de El Hierro, sensor ideal del cambio climático.”